BAJANDO PARA SUBIR
Bajando para Subir
Jesucristo vino del lugar más alto, del trono de Dios, y descendió al lugar más bajo; vino a nacer en un pesebre, en el peor lugar, Nazareth, siendo hijo de un carpintero. ¿Si la meta era exaltar a Cristo como Rey de reyes, por qué enviarlo al lugar más humilde de toda la tierra? Vino del lugar más alto al lugar más bajo de la tierra, pero Jesucristo resucitó y ahora está sentado en el trono a la derecha del Padre.
En el pasaje de la historia de hoy vemos que Jacob y su familia estaban saliendo de la tierra prometida por Dios y se dirigían a Egipto.
Puntos importantes:
Jacob sabía que Dios iba a estar con ellos (Génesis 46:1-3) – Cuando Jacob escuchó que su hijo José estaba vivo y que el faraón los llamaba a Egipto, él estaba gozoso. Empacaron y empezaron a descender a Egipto; sin embargo, en la trayectoria, Jacob empezó a tener temor, recordaba que Dios los llamó a estar en la tierra prometida y ahora debían empacar lo que poseían y dejar esa tierra por completo, la tierra que no debían dejar y que era la promesa de Dios. Egipto no era un lugar confiable, donde se podían sentir cómodos, así que Jacob determina acampar en Beerseba, la frontera entre Canaán y Egipto, y ofrecer sacrificios a Dios para conocer su voluntad. Allí, en medio de la noche, Dios se le aparece nuevamente a Jacob. En este encuentro Dios calma sus temores y le dice que no tema ir a Egipto, que es su plan y le da tres promesas:
Que irá a Egipto con él, estará con él y que no lo dejaría solo
Hacer de ellos una gran nación mientras estén en Egipto
Dios los sacaría de Egipto
Jacob entiende que este era el propósito de Dios y decide confiar en Él. Dios nos está llevando al propósito de ser humildes y como Jacob podemos confiar en estas tres promesas. Dios nos está enseñando, equipando, construyendo nuestro carácter, porque quiere hacer grandes cosas en nuestras vidas. Podemos confiar completamente en Dios
2. Jacob estaba totalmente comprometido para bajar a Egipto – A pesar de que no entendía todos los detalles de lo que sucedería, Jacob confió en el Señor, no dejó nada en Canaán, la tierra prometida, no dejó nada atrás. Esto fue un gran paso de fe debido a la promesa que Dios le hice de llevarlo de vuelta.
Hay momentos en nuestras vidas que Dios nos llama a tomar este tipo de decisiones y que muchas veces pensamos que va en una dirección opuesta a lo que Él nos ha prometido. Muchas veces la voluntad de Dios son las puertas cerradas, las pausas de nuestros sueños. Nuestra respuesta debe ser confiar en su palabra.
3. Dios tenía un plan final para el clan de Jacob (Génesis 46:26-27) – Dios le promete que cuando estén en Egipto los haría una gran nación. ¿Por qué no ejecutó este plan cuando Jacob estaba en Canaán? Dios lo hace de esta manera porque en la tierra de Canaán ellos estaban siendo influenciados por los clanes que estaban alrededor y estaban siendo seducidos por los dioses de esos clanes, estaban casándose con estas mujeres. Estaban siendo absorbidos por la cosmovisión de estas tribus. Dios los saca de la tierra de Canaán y los pone en la tierra de Gosén. Los Egipcios odiaban a los extranjeros, así que no se mezclaron con ellos. Por 400 años la nación de Israel era puramente hebrea y se multiplicaron. Dios protegió al clan de Jacob para que se mantuviesen puros. Dios tiene un propósito con lo que Dios está haciendo en nuestras vidas.
4. Dios usa la humillación para sus propósitos en nuestras vidas –Jacob y José se encuentran, se abrazan y lloran. Es la restauración de una familia que estaba rota y finalmente se reúnen y reconcilian. Es una hermosa imagen que refleja a Jesucristo cuando asciende al cielo y se reencuentra con su Padre. Vemos a la familia reunida y José dice algo sorprendente: José no los lleva al palacio, donde él vivía. Él dijo que iría donde el faraón y diría que ellos eran pastores y ellos lo confirmarían cuando el faraón le preguntara. Los pastores de ovejas eran una abominación para los egipcios, los odiaban. Eran considerados como gente sucia.
¿Por qué José le dice esto al faraón, si este había invitado a su familia? José baja la opinión de los egipcios:
Porque era la verdad, ellos eran pastores
al saber que eran pastores, los egipcios lo dejarían solos.
“Dios nos trae abajo para más adelante llevarnos arriba”
Aplicaciones:
Si estamos pasando por alguna situación incierta, debemos ir al Señor a través de su palabra, de la oración, confiar en Dios.
Decidir creer en esas promesas de Dios, Él nos asegura que siempre estará con nosotros, Él nos llevará al otro lado en victoria.