EL MODELO DE CONVERSACIÓN CON DIOS:: «Nuestro Padre en el cielo» – Parte 2

El Modelo de Conversación con Dios – Parte 2: «Nuestro Padre en el Cielo» (Mateo 6:9)

Jesús no enseñó el Padre nuestro a modo de ser una repetición, pues directamente antes de enunciarla, Él nos enseña que no debemos orar con vanas repeticiones.
En el resto del Nuevo Testamento no vemos que los discípulos repitan la oración una y otra vez. Jesús lo dio como plantilla de oración, categorías a enfocarnos.
Lo que Dios quiere escuchar es nuestro corazón

Padre nuestro: introducción y 6 peticiones

El nombre de Dios sea exaltado
Que el Reino de Dios venga
Que la voluntad de Dios sea hecha
Provisión personal
Perdón
Lidiar con nuestro pecado/tentación

Y están en ese orden particular por una razón: Dios desea que nos enfoquemos en otras cosas en nuestra oración antes de pedir por nuestras necesidades.
La gloria de Dios,
el Reino de Dios y
la Voluntad de Dios.

Hablar primero con Dios de Dios nos define como adoradores y cuando lo hacemos cumplimos nuestro propósito de ser.
Es una disciplina desarrollar y poner estas cosas de primero en la oración.
Esto ayuda a poner al resto de nuestros problemas en perspectiva de Dios e indirectamente nos ayuda a ser menos egoístas, a ser mejores siervos porque ponemos la Gloria de Dios antes que lo nuestro.

“Padre nuestro que estás en los cielos”

– PADRE: Debemos participar en comunidad porque somos hijos e hijas de un mismo padre. Pero no un club social donde dejamos marginado a Dios. La familia de Dios pasa tiempo junta alabando a Dios.

– NUESTRO: No estamos solos, sino que formamos parte de una comunidad a pesar de la oración es en privado. Recordar que somos parte de una familia, una familia unida por Dios.

– PADRE NUESTRO: Dios es mucho mayor que un padre terrenal, Dios es Padre, incluso para el huérfano. Combinación entre su magnificencia y sublime, pero a la vez ese Padre cercano.

El concepto de Dios siendo nuestro Padre nos quita el temor. Tenemos el padre más poderoso del universo. Nuestro Padre nos da un sentido de seguridad y estabilidad. Éramos enemigos y pecadores y ahora somos adoptados.

Aplicaciones:

No es otra enseñanza, el Señor nos está llamando a orar como Iglesia
Haz que la oración sea una prioridad en tu vida
¿Ves tú a Dios como tu PADRE, te ves como UN HIJO/A de Dios, como tu identidad principal?