HASTA EN LAS MEJORES FAMILIAS

Hasta en las mejores familias
Hoy nos estaremos enfocando en un pasaje que nos habla sobre la niñez de Jesús.

Jesús creció en un ambiente como el nuestro. Tenía hermanos, primos y experimentó de primera mano muchas de las cosas que pasamos nosotros como familia. Eso es una gran bendición. ¡Nos hace sentir que no estamos solos!
Nazaret, el pueblo escogido por Dios donde Jesús nació, era una comunidad odiada, olvidada y socialmente discriminada. Un lugar del que decían “Nada bueno puede salir de allí”. Jesús creció en una familia discriminada, en medio de la pobreza y de una dictadura romana.

Características de los padres terrenales de Jesús:
José era llamado un hombre justo, protegió la integridad de María, incluso antes de que el ángel le revelara el origen de Jesús. María fue una mujer bendita, llena de gracia, devota y obediente. Ambos estaban enfocados en escuchar y buscar la voluntad de Dios y en cuidar a Jesús. Lucas 2:40.

2. Relevancia de la formación espiritual y social en la familia de Jesús:
Eran fieles a su fe y a las costumbres de su pueblo. Iban con sus hijos todos los años a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. Para ellos era importante invertir en la formación espiritual de su familia e incluirlos en una comunidad. Jesús tenía 12 años y para la comunidad judía es una edad de transición. Lucas 2: 42.
3. Problemas y pruebas que se dieron en el entorno familiar de Jesús:
Jesús se separó de su familia cuando estaban en la fiesta de la Pascua y eso angustió a sus padres. Lucas 2: 45. Muchas familias enfrentan problemas económicos, debido a la conducta de los niños, por adicciones, etc. Hay situaciones que pasan incluso en una familia que asiste a una iglesia, porque hasta las mejores familias pueden ocurrir.
4. Importancia de la comunicación asertiva para la resolución de conflictos:
Jesús sabía que iba a hablar y confrontar con los maestros de la ley. Era el inicio de su manifestación como el Mesías. Lucas 2:47. Vemos a María preguntarle ¿Por qué nos has hecho así? No le dice desobediente, ni lo etiqueta. Ese es un patrón muy importante que puede ser replicable en nuestra relación entre padres e hijos y desde el punto de vista social. Vemos unos padres que lo escucharon aunque no lo entendieron. Lucas 2:50. Si no escuchamos a nuestros niños, a nuestra esposa, esposo en algún otro lado van a ser escuchados.
5. La obediencia como muestra de gratitud y respeto a nuestros padres:
Jesús tuvo una infancia y adolescencia que transcurrió como la de cualquier otro niño, a pesar de que no era un niño cualquiera. Él tenía el dominio sobre el universo, pero estaba sujeto y obedecía a sus padres en la tierra. Lucas 2:51. Era obediente porque él conocía la ley que dice que tenía que honrar y respetar a sus padres.
Siempre habrá problemas, vamos a tener pruebas, lo importante es ver cómo respondemos como familia.
Aplicaciones
1. Involucremos de manera activa a cada uno de los miembros de nuestra familia en comunidades de fe y tomemos un tiempo para explicarle a los niños como la manera de reunirnos ha cambiado. El crecimiento espiritual de ellos tiene que continuar.
2. Hablemos como familia desde el corazón e involucremos a todos en la toma de decisiones.
3. Creemos espacios donde como familia podamos ejercitarnos y desarrollarnos, donde hagamos ejercicio, compartamos la Palabra. Que eso sea una prioridad en nuestras vidas.