LUCHANDO CON DIOS EN ORACIÓN (2da Parte) / Wrestilng with God in prayer (2nd Part)
Mientras Jacob se encontraba solo, un hombre empieza a luchar con él hasta el amanecer. Era Dios luchando con Jacob. Es una muestra física de un tipo de oración. ¿Qué es lo primero a lo que recurres cuando estás en un problema? ¿Es orar, es buscar a Dios, es ir a su palabra, es ir a alguna persona, es saturarme de actividades?
A través de la experiencia de lucha que tuvo Jacob con Dios podemos desarrollar principios. La realidad es que orar no es fácil, muchas veces nos vemos mirando al techo, hablando con alguien, cuyas expresiones no puedo ver, una persona que no puedo sentir. Los discípulos tuvieron la misma lucha, tuvieron la misma pregunta, aun cuando vieron a Jesús que se iba solo y pasaba tiempo en constante oración. Miremos la vida de Jesús, lo importante que era la oración para Él.
¿Qué es lo que debo yo buscar y lograr en mi tiempo de oración? ¿Cuál es el propósito de ese tiempo que pasó con Dios en oración? La oración no es para Dios, es para nosotros. Dios es capaz de manejar el universo con o sin mis oraciones. Dios ha creado este espacio de tiempo para una disciplina a la cual nos llama para nuestro caminar como cristianos a través de la oración. Es un lugar donde luchamos con nuestra realidad, con nuestras emociones, con nuestra carne. La oración no es un trabajo que nosotros hacemos para complacer a Dios. Dios está más complacido a través de lo que Jesús hizo en la Cruz.
Hay tres propósitos en las que debemos enfocarnos en nuestra vida de oración:
En la oración Dios nos recuerda cuanto le necesitamos (Génesis 32:25-26)
En la oración Dios requiere que nombremos nuestra naturaleza
A través de la oración Dios nos revela nuestra identidad en Cristo